Gran éxito en la acampada Barrio Vivo 2015


El fin de semana del 13 y 14 de junio de este año 2015, tuvo lugar la tercera acampada de Barrio Vivo Algete. Tuvimos un tiempo estupendo, pese a las amenazadoras previsiones meteorológicas. Nos auguraban mucha agua y tormentas, después de una semana de calor abrasador que había dejado a la zona muy seca y bastante incómoda para acampar. Sin embargo, no quisimos cancelar la cita y... Tuvimos muchísima suerte. Finalmente, la temperatura no pudo ser más propicia.



El sábado de mañana, 13 niños de entre 8 y 12 años, acompañados por 4 adultos, comenzaron la excursión caminando desde el aparcamiento del Instituto Bécquer, por el camino del Espinar, hasta llegar a Prado Norte. Allí repusieron fuerzas, cinco minutos de descanso, un buen trago de agua y a retomar el camino. La marcha siguió por la vía pecuaria hasta llegar al cruce del río Jarama, y justo tras el río,  mochilas al suelo y a montar el campamento.  El resto de los participantes, que llegaron en coche, esperaban al grupo de caminantes en la zona de acampada con todo el equipamiento necesario. Habían sido 6 kms, de camino donde dio tiempo de charlar, reír y cantar.

Tras montar todas las tiendas, que llegaron a la decena, el hambre apretaba y fue el momento de compartir viandas  entre todos: filetes, tortillas, ensaladas, fruta, refrescos, sangría y cerveza... Después de reposar el almuerzo, un nutrido grupo de campistas, bolsas de basura en mano, recorrieron la zona de las lagunas recogiendo la escasa basura que podía haber, ya que tras las numerosas batidas de limpieza llevadas a cabo por la asociación y otros colectivos, la finca estaba en óptimas condiciones.

Los más jóvenes al volver acalorados, echaron una guerra de paint ball (con agua) y muchos de ellos acabaron dándose un buen chapuzón en el río. Luego un partido de fútbol mixto y de varias edades mezcladas, acabó con un  3-5, muy peleado. Los más pequeños jugaron también a otros juegos como la riña de gallos, juegos de memoria, tarjetas a la espalda, mímica y adivinanzas, etc...


Al llegar la noche tuvo lugar una de las actividades más sorprendentes. El cielo estaba despejado y lleno de estrellas. Una gran aficionada a la astronomía comentaba las constelaciones circunpolares con todo lujo de datos. Y todos disfrutaron como niños cuando sacó una linterna con láser verde, al más puro estilo Dar Vader y  señalaba cada estrella y constelación para distinguirlas mejor.  Vimos la Osa Mayor y la Osa Menor con su Estrella Polar, conocimos a la brillante Vega, al cisne volando, Venus y Júpiter con sus satélites, y muchos astros más.

Una vez devorada la cena, continuaron las risas y tertulias nocturnas. Las más interesantes, sin duda, las historias de terror que los chavales se empeñaban en contarse unos a otros, pese a sus propios miedos. Muchos de ellos para meterse en los sacos, reclamaron después a sus padres, nada de estar solos en la tienda, que estaban totalmente sugestionados. Pero en cuanto posaron sus cabezas en los aislantes, cayeron todos profundamente dormidos.

A la mañana siguiente, Javier Grijalbo, naturalista, ecologista y experto en aves y vegetación de Madrid, nos esperaba temprano para comenzar una ruta por la finca de las Huelgas. Durante toda la mañana, campistas de todas las edades disfrutaron aprendiendo con las expllicaciones de Javier. Todos pudieron conocer los árboles de ribera, y el por qué de sus características, árboles y arbustos pioneros, los diferentes tipos de álamos y sauces, la necesaria retama, varias clases de juncos, la belleza de los cardos, las numerosas herbáceas, los ajos silvestres (planta muy apreciada y escasa en la zona), el hinojo, la achicoria (el café de nuestros abuelos), el gorgologo (que se utilizaba para pescar), la artemisia, el majuelo, la menta, y las plantas enredaderas que trepan en busca de luz... Descubrieron posibles marcas de jabalí o corzo en las cortezas de árboles, y hasta hubo "momento pánico" y risas, cuando por accidente uno de los miembros del grupo pisó una culebra. También pudimos ver y escuchar a aves y pájaros (Javier nos explicó la diferencia entre ambos, sólo los últimos pueden cantar): golondrinas, aviones, buitres leonados, vencejos, coujadas, garcillas boyeras, gorriones morunos y hasta un torcecuellos, especie muy poco común.

Con toda la información recopilada, se está confeccionando un herbario, o cuaderno de campo con las especies de la zona de las lagunas, donde se añadiran dibujos, fotos y explicaciones.
Tras la exploración botánica de la finca, llegó el momento de comer todos juntos de nuevo, acabar con las existencias para descargar peso en la mochila de vuelta. Se recogio el campamento, dejándo la zona en las mismas perfectas condiciones que cuando llegaron. Y vuelta a casa.

El objetivo de esta acampada y las anteriores, así como las numerosas actividades que se llevan a cabo en la zona a lo largo del año, es llegar a conocer bien la zona, llegar a quererla, porque solo apreciando un parque natural como este, se puede llegar a quererlo, por tanto a conservalo y protegerlo.  Usarlo para disfrutarlo. Una finca a escasos 7 km. de Algete, para recorrer andando o en bicicleta, para avistar aves, y reconocerlas por sus trinos, para disfrutar de momentos de naturaleza, en un entorno bello, agradable y cómodo.


Comentarios

  1. Otro año más, muchas gracias a toda la gente de Barrio Vivo que se ha ocupado de organizar esta acampada. Ha sido un lujo haber compartido con vosotros este fin de semana, mis niños están deseando repetir.

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