Historia viva en Algete
Junto al actual centro comercial a la entrada del pueblo, hemos comenzado una ruta histórica por Algete, de la mano de José Valdezate. Nuestro cicerone es gran estudioso y conocedor de la historia de este pueblo en el que vivimos, y, de forma voluntaria y gratuita, ha tenido la deferencia de compartir un poquito de su sabiduría con un grupo de vecinos curiosos. Vaya por delante nuestro agradecimiento y espereranza de que la iniciativa se vuelva a repetir.
Aquí vamos a rescatar algunos de los momentos e historias que han pasado en las calles que hoy pisamos.
Algete, debe su nombre al árabe, muy probablemente a la palabra Al Satt, que significaba orilla. José se inclina a que fuera debido a la orilla del camino jalonado de torres vigías que unía Alcalá y Torrelaguna, y no a la orilla del río o el arroyo.
Había cuatro ermitas en Algete, una en cada punto cardinal, junto a cada una de las entradas principales del pueblo: Humilladero al Oeste, San Roque al Este, Concepción al Norte y Valderrabé al Sur. Se cree que la del Humilladero debía su nombre a que allí se castigaba públicamente a los miserables que eran torturados y/o asesinados por las autoridades y sus cuerpos expuestos públicamente a la entrada del pueblo para dar ejemplo a los que entraban desde de Madrid. Y es que Algete, llegó a ser una ciudad importante en la Edad Media al conseguir su autonomía judicial y criminal y para ello tenía que poseer ciertos instrumentos: horca, cadenas, cuchillo, picota y cepo.
Otra teoría menos creíble dice que el nombre de la ermita viene del Arroyo del Almuñadero, cuyo nombre árabe de difícil pronunciación se fue adaptando al actual Humilladero.
La que hoy conocemos como calle Mayor, se construyó más allá del año 1.700. Anteriormente, la entrada al pueblo era por el Camino de Madrid, que por la calle Caldo y donde cruzaba con la de Alcalá, desembocaba en el mercado viejo.
Algete era un lugar con mucho más desnivel del que tenemos ahora. Donde se ubica el ambulatorio, había antes un barranco, y el arroyo Almuñadero tenía un más que aceptable sonoro caudal gracias a sus varios afluentes, entre ellos el de Virtudes. Algete contaba con varios lavaderos públicos de los que hoy apenas nos quedan los dibujos que José ha esbozado. En el lavadero de la Fuentecilla, la ropa se tendía en el suelo, o sobre las matas de cambrón que daban muy buen olor. Hoy la Fuentecilla está abandonada y en pésimas condiciones.
Sobre ese lugar hemos aprendido que antes de llegar a Belvis, había un poblado judío llamado Villanueva del Burrillo. Dicen que allí los vecinos acumulaban mucha plata, y que desde entonces se oía este dicho: "Más vale Cobeña que no Alcalá y toda su tierra".
Seguimos la ruta por el Camino de las Fuentes, que en realidad es el cauce del Arroyo Almuñadero, y otros llaman el Arroyo de la Cerrada. José Valdezate nos dice que es más creíble el primer nombre, que viene del vocablo árabe Al Munia, que significa lugar de huertas. Desde el Cerro Testigo, junto al Polideportivo, debían verse todas las huertas. Por cierto, que las tierras algeteñas siguen prácticamente igual que hace siglos. Aunque este cerro atestigua que en realidad estaban unos 100 metros más altas.
La Fuente del Cigarral, es la más importante del camino. Tiene dos caños, aunque en su tiempo, cuando la población aumentó, le abrieron un tercer caño, cuyas aguas manaban limpias ya que provenían de una galería a más de 5 metros de profundidad.
Algete se comenzó a fortificar en el 720. Perteneció desde 1085 al Toledo conquistado por Alfonso VI. Fue pasando de mano en mano como territorio de reyes, nobles e iglesia. Alfonso VIII lo puso en manos de la marquesa Urraca Fernández hasta 1118. Por entonces Alcalá era todavía árabe. Pasó a manos de la mesa arzobispal de Toledo, luego Segovia, vuelta a Toledo, de nuevo a la Corona... Algete era esquilmado por los impuestos que imponía el diezmo eclesiástico, los que costeaban las guerras de la Corona y demás alcábalas. Sus últimos dueños fueron los Hurtado de Mendoza. Finalmente Algete se compró así mismo por 40.000 ducados y dejó de pagar buena parte de los impuestos que sus dueños le exigían.
En 1576, Algete contaba con 476 vecinos (en realidad eran las casas, así que esta cifra debería ser multiplicada por 3 o 4). Alcobendas solo tenía 200, y Coslada apenas 30. Talamanca era la capital de la zona entonces y contaba con 367.
De nuestros vecinos cercanos, hemos aprendido que San Sebastián de los Reyes se constituyó en 1492, cuando se independizó de Alcobendas y de su malévolo Señor, el terrorífico Conde de Puñorostro, que tenía atemorizada y explotada a la población. Una representación vecinal fue al encuentro de los Reyes Católicos que pasaban cerca de Algete y le rogaron que les librara del yugo de ese tirano. Y finalmente lo lograron.
Volviendo a Algete, tuvimos varios puentes que hoy ya no perduran. Uno de ellos fue el del Arrabal, sobre el Arroyo Almuñadero a la altura del cruce de la C/ Alcalá con la Ronda de la Constitución. El Arrabal era la zona donde habitaban los árabes y judíos en Algete. Hoy en día son los barrios de Virtudes, Montesoro y Cigarral. Los cristianos se reservaron la zona más noble del Castillo, al otro lado del arroyo. Y no es que Algete tuviera un Castillo, pero así se llamaba la zona aledaña a las torres vigías ubicadas en el cerro de la Concepción y sus cercanías, donde estaría la casa principal del jefe de regimiento de turno.
En el camino de las Virtudes, también sobre el arroyo de su mismo nombre, se encuentra su fuente homónima. Se cree que algún vecino debió conocer sus propiedades curativas, pero no por el agua, sino porque masticaría las hojas de sauce junto a la fuente, que contienen ácido acetilsalicílico (aspirina).
Bajo el Cerro Aragón, bordeado por el arroyo Virtudes y el de Almuñadero, se pueden ver todavía entradas a las cuevas. El cerro está todalmente minado. Hay una ciudad subterránea bajo el Algete más grande que el propio pueblo datada en la época árabe.
Paseando por el camino de Covicha hemos sabido que este nombre es en realidad una derivación del vocablo "cueva". Allí encontramos la fuente del Burro. Hace años, cuando no había tantos médicos ni veterinarios como hoy, dicen que un burro enfermó y los dueños lo abandonaron a su suerte. El burro debió beber en esta fuente y regresó a su corral sano y contento. Desde entonces el nombre de la fuente le recuerda.
Más alejada estaba la fuente del Noque, prácticamente en un barranco sus aguas sabían a raíces. Ya no existe, pero allí había un gran agujero donde curtían las pieles los vecinos. Y había que tener cuidado, pues muy cerca había una zona con ¡arenas movedizas!
La Fuente de las Gotas, aún sigue ahí, pero es justo eso lo que mana de su caño, unas gotas. En sus muros José Valdezate, nos ha mostrado varias piedras talladas en forma de lanza y puntas de flecha, algunas con 20.000 años, y están recogidas por los alrededores de nuestro pueblo.
Y más cosas hemos podido saber que se nos quedan en el tintero, pero todavía nos quedan muchas ganas de volver a quedar con José y otros vecinos y aprender más historias sobre Algete y sus alrededores.
(Hemos querido entender estos datos históricos, pero al escucharlos o al transcribirlos hemos podido errar, así que rogamos que estos datos se modifiquen por José Valdezate o quien tenga a bien corregirlos si están errados).
Aquí vamos a rescatar algunos de los momentos e historias que han pasado en las calles que hoy pisamos.
Algete en alfabeto árabe |
Había cuatro ermitas en Algete, una en cada punto cardinal, junto a cada una de las entradas principales del pueblo: Humilladero al Oeste, San Roque al Este, Concepción al Norte y Valderrabé al Sur. Se cree que la del Humilladero debía su nombre a que allí se castigaba públicamente a los miserables que eran torturados y/o asesinados por las autoridades y sus cuerpos expuestos públicamente a la entrada del pueblo para dar ejemplo a los que entraban desde de Madrid. Y es que Algete, llegó a ser una ciudad importante en la Edad Media al conseguir su autonomía judicial y criminal y para ello tenía que poseer ciertos instrumentos: horca, cadenas, cuchillo, picota y cepo.
Otra teoría menos creíble dice que el nombre de la ermita viene del Arroyo del Almuñadero, cuyo nombre árabe de difícil pronunciación se fue adaptando al actual Humilladero.
Dibujo de puente de madera y lavadero que hubo en el actual parque de las Fuentes |
La que hoy conocemos como calle Mayor, se construyó más allá del año 1.700. Anteriormente, la entrada al pueblo era por el Camino de Madrid, que por la calle Caldo y donde cruzaba con la de Alcalá, desembocaba en el mercado viejo.
Algete era un lugar con mucho más desnivel del que tenemos ahora. Donde se ubica el ambulatorio, había antes un barranco, y el arroyo Almuñadero tenía un más que aceptable sonoro caudal gracias a sus varios afluentes, entre ellos el de Virtudes. Algete contaba con varios lavaderos públicos de los que hoy apenas nos quedan los dibujos que José ha esbozado. En el lavadero de la Fuentecilla, la ropa se tendía en el suelo, o sobre las matas de cambrón que daban muy buen olor. Hoy la Fuentecilla está abandonada y en pésimas condiciones.
Boceto del lavadero sobre el Arroyo de Amuñadero |
Sobre ese lugar hemos aprendido que antes de llegar a Belvis, había un poblado judío llamado Villanueva del Burrillo. Dicen que allí los vecinos acumulaban mucha plata, y que desde entonces se oía este dicho: "Más vale Cobeña que no Alcalá y toda su tierra".
Seguimos la ruta por el Camino de las Fuentes, que en realidad es el cauce del Arroyo Almuñadero, y otros llaman el Arroyo de la Cerrada. José Valdezate nos dice que es más creíble el primer nombre, que viene del vocablo árabe Al Munia, que significa lugar de huertas. Desde el Cerro Testigo, junto al Polideportivo, debían verse todas las huertas. Por cierto, que las tierras algeteñas siguen prácticamente igual que hace siglos. Aunque este cerro atestigua que en realidad estaban unos 100 metros más altas.
La Fuente del Cigarral, es la más importante del camino. Tiene dos caños, aunque en su tiempo, cuando la población aumentó, le abrieron un tercer caño, cuyas aguas manaban limpias ya que provenían de una galería a más de 5 metros de profundidad.
Fuente del Cigarral |
Algete se comenzó a fortificar en el 720. Perteneció desde 1085 al Toledo conquistado por Alfonso VI. Fue pasando de mano en mano como territorio de reyes, nobles e iglesia. Alfonso VIII lo puso en manos de la marquesa Urraca Fernández hasta 1118. Por entonces Alcalá era todavía árabe. Pasó a manos de la mesa arzobispal de Toledo, luego Segovia, vuelta a Toledo, de nuevo a la Corona... Algete era esquilmado por los impuestos que imponía el diezmo eclesiástico, los que costeaban las guerras de la Corona y demás alcábalas. Sus últimos dueños fueron los Hurtado de Mendoza. Finalmente Algete se compró así mismo por 40.000 ducados y dejó de pagar buena parte de los impuestos que sus dueños le exigían.
En 1576, Algete contaba con 476 vecinos (en realidad eran las casas, así que esta cifra debería ser multiplicada por 3 o 4). Alcobendas solo tenía 200, y Coslada apenas 30. Talamanca era la capital de la zona entonces y contaba con 367.
De nuestros vecinos cercanos, hemos aprendido que San Sebastián de los Reyes se constituyó en 1492, cuando se independizó de Alcobendas y de su malévolo Señor, el terrorífico Conde de Puñorostro, que tenía atemorizada y explotada a la población. Una representación vecinal fue al encuentro de los Reyes Católicos que pasaban cerca de Algete y le rogaron que les librara del yugo de ese tirano. Y finalmente lo lograron.
José Valdezate explica al grupo la historia de Algete |
Volviendo a Algete, tuvimos varios puentes que hoy ya no perduran. Uno de ellos fue el del Arrabal, sobre el Arroyo Almuñadero a la altura del cruce de la C/ Alcalá con la Ronda de la Constitución. El Arrabal era la zona donde habitaban los árabes y judíos en Algete. Hoy en día son los barrios de Virtudes, Montesoro y Cigarral. Los cristianos se reservaron la zona más noble del Castillo, al otro lado del arroyo. Y no es que Algete tuviera un Castillo, pero así se llamaba la zona aledaña a las torres vigías ubicadas en el cerro de la Concepción y sus cercanías, donde estaría la casa principal del jefe de regimiento de turno.
En el camino de las Virtudes, también sobre el arroyo de su mismo nombre, se encuentra su fuente homónima. Se cree que algún vecino debió conocer sus propiedades curativas, pero no por el agua, sino porque masticaría las hojas de sauce junto a la fuente, que contienen ácido acetilsalicílico (aspirina).
Bajo el Cerro Aragón, bordeado por el arroyo Virtudes y el de Almuñadero, se pueden ver todavía entradas a las cuevas. El cerro está todalmente minado. Hay una ciudad subterránea bajo el Algete más grande que el propio pueblo datada en la época árabe.
Paseando por el camino de Covicha hemos sabido que este nombre es en realidad una derivación del vocablo "cueva". Allí encontramos la fuente del Burro. Hace años, cuando no había tantos médicos ni veterinarios como hoy, dicen que un burro enfermó y los dueños lo abandonaron a su suerte. El burro debió beber en esta fuente y regresó a su corral sano y contento. Desde entonces el nombre de la fuente le recuerda.
Más alejada estaba la fuente del Noque, prácticamente en un barranco sus aguas sabían a raíces. Ya no existe, pero allí había un gran agujero donde curtían las pieles los vecinos. Y había que tener cuidado, pues muy cerca había una zona con ¡arenas movedizas!
Fuente del Burro, junto al camino de Covicha |
La Fuente de las Gotas, aún sigue ahí, pero es justo eso lo que mana de su caño, unas gotas. En sus muros José Valdezate, nos ha mostrado varias piedras talladas en forma de lanza y puntas de flecha, algunas con 20.000 años, y están recogidas por los alrededores de nuestro pueblo.
Y más cosas hemos podido saber que se nos quedan en el tintero, pero todavía nos quedan muchas ganas de volver a quedar con José y otros vecinos y aprender más historias sobre Algete y sus alrededores.
(Hemos querido entender estos datos históricos, pero al escucharlos o al transcribirlos hemos podido errar, así que rogamos que estos datos se modifiquen por José Valdezate o quien tenga a bien corregirlos si están errados).
Fuente de las Gotas |
Herramientas de cuarzo, caliza y sílex encontradas en antiguas poblaciones prehistóricas por la campiña algeteña |
Un verdadero placer, leer el resumen de la ruta que habéis recorrido hoy.
ResponderEliminarMuchas gracias de todo corazón.
Gracias a ti por interesarte en leerlo y disfrutarlo. Un abrazo!
EliminarQuisiera saber dos cosas:¿por que, el barrio de Monte el Tesoro, ha pasado a denominarse Montesoro ?. Cuando viene a vivir, allí, no se llamaba así. El otro tema es el nombre de Valderrabé. ¿que significa?.
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