El cielo de otoño
La
salida que hemos organizado desde Barrio Vivo para observar el cielo el día 14
de noviembre va a estar marcada por las constelaciones de otoño y de invierno
que vamos a poder ver, y sobre todo porque al anochecer mucho más pronto, las horas
en las que podemos observar se adelantan, pero tenemos que ir bien abrigados por si acaso llegan el frío y la humedad
Qué constelaciones podemos observar:
Además de las circumpolares,
de las que ya hemos hablado anteriormente, que constelaciones podemos observar:
Pegaso
En
la mitología griega Pegaso es el caballo alado de Perseo e iba en él montado
cuando salvo a Andrómeda.
Es
una constelación reconocible por la forma cuadrada que sería el cuerpo del
caballo. Sus dos estrellas más brillantes Scheat (en el mapa figura con el
nombre de Funda) y Markab forman una línea que señala a la estrella Polar, lo
que nos sirve para localizarla.
Markab,
que significa “silla de montar”, está a 105 años-luz y es una estrella
variable.
Scheat
es una gigante roja cuyo diámetro es 145 veces superior al del Sol, siendo su
distancia de 190 años-luz.
Algenib,
que significa “ala de caballo”, está mucho más lejos, a 470 años-luz, y
realmente son un sistema de tres estrellas.
Curiosamente,
la estrella que ocupa su vértice nororiental, Alpheratz (α And), ya no forma
parte de esta constelación, sino de la vecina Andrómeda.
La
constelación de Andrómeda se localiza pegadita a Pegaso, como ya hemos dicho
antes, la estrella Alpheratz pertenece a esta constelación aunque forme parte
del gran cuadrado de Pegaso.
Lo
más interesante de Andrómeda no son sus estrellas, sino M31 “la Gran Nebulosa
de Andrómeda”, es la única galaxia que vemos a simple vista en el hemisferio
norte. Nos separan de ella la friolera de dos millones trescientos mil
años-luz, es decir que la imagen que vemos corresponde a lo que paso cuando los
hombres todavía estábamos subidos a los árboles. Contiene unos 370.000 soles.
Mirar hacia M31 es viajar directamente al pasado.
Se localiza prolongando la línea que va de Mirach a la μ And, justo en
el centro de la horquilla, hacia el noroeste. A aproximadamente la misma
distancia de μ que la que separa a esas dos estrellas podremos verla. Si el
cielo es suficientemente oscuro podremos notar a simple vista que no es una
estrella como las demás: se ve difusa y alargada. De hecho su tamaño aparente
alcanza un grado y medio, unas tres veces el de la luna llena.
Fotografía de M31.
En la mitología esta
constelación representa a Deucalión, hijo de Prometeo, navegando.
La podemos localizar si
prolongamos la línea que une Vega, en el Cisne, y Altair, en el Aguila.
La estrella más notable es
Sadalmelik, que está a 1.300 años-luz y brilla 6.000 veces más que el Sol.
Piscis
es una constelación que está formada por estrellas débiles, pero es muy
interesante porque actualmente en ella se encuentra el punto vernal, que es el
lugar en el que se encuentra el Sol en el equinoccio de primavera.
En
la mitología La Ballena amenazaba con inundar Etiopía con una ola gigante, y
para evitarlo Perseo debía liberar a Andrómeda.
Su
estrella más brillante es Menkar, una gigante roja que está a 130 años-luz.
Su
estrella Mira “la estrella maravillosa”, es la primera estrella variable
descubierta (por D. Fabricius en 1.596). Tiene un periodo medio de 331 días, y
pasa de tener magnitud 2 en su máximo a magnitud 9 en su mínimo. Dicho de otra
manera, pasa de ser la estrella más brillante de la constelación a no ser
visible a simple vista.
Tauro,
el toro, es una constelación destacable por tener dos de los cúmulos estelares
más bonitos las Híades y las Pléyades.
Aldebarán
es su estrella más brillante. Es una gigante roja cuyo diámetro es 36 veces el
del Sol, y está a 68 años-luz.
Las
Híades rodean a Aldebarán y están a 130 años-luz, por lo que aunque visualmente
están juntos, en realidad están muy, muy separados.
Mirando
hacia el norte localizamos a las Pléyades, también conocidas por las siete
hermanas o las siete cabritillas. Tienen una forma parecida a la Osa Menor,
pero su tamaño es mucho más pequeño. Aunque a simple vista sólo distinguimos
siete estrellas, el cúmulo está formado por más de doscientas. Se encuentra a
450 años-luz, y son estrellas muy jóvenes, se formaron aproximadamente hace 80
millones de años.
Aunque
a simple vista no lo vemos, es interesante saber que cerca de la estrella z se encuentra M1 “la nebulosa del cangrejo”, que es
el resto de una estrella cuya explosión observaron los chinos el 5 de julio de
1.054. Se encuentra a una distancia de 6.300 años-luz.
Fotografía de La Nebulosa del Cangrejo, tratada con
distintos filtros para destacar sus distintos colores.
Las
dos siguientes constelaciones estarán muy cerca del horizonte para poderlas
observar a primera hora de la noche, pero me parece que como son fáciles de
observar desde cualquier lugar podemos incluirlas.
Géminis,
o Los Gemelos, es una constelación muy extensa en la que destacan las estrellas
Castor y Pollux. Para no equivocarnos, Castor es la estrella que está más cerca
de la estrella Capella de la constelación del Auriga.
Pollux,
la más brillante, es una estrella doble que se encuentra a 35 años-luz y cuyo
brillo es 35 veces más fuerte que el del Sol.
Castor,
es un conjunto de seis estrellas que giran alrededor de un centro de gravedad
común cada 380 años. Y están situadas a 45 años-luz.
Es
la constelación más bonita que se puede ver en nuestro cielo (o eso me parece a
mí). Y su leyenda es todo un cuento: Orión “el cazador”, se jactaba de que
podía matar a cualquier animal, y Zeus le reto a que luchar con el escorpión.
El combate fue tan terrible que los dioses decidieron separarlos, para eso los
enviaron al cielo pero en lugares opuestos, de forma que nunca se ven al mismo
tiempo las dos constelaciones. En verano vemos Escorpio y en invierno Orión.
La
estrella principal, Betelgeuse “el hombro del gigante”, es una gigante roja
cuyo diámetro es 400 veces el del Sol y que se encuentra a 520 años-luz.
Rigel
“el pie del gigante”, es una estrella azul 57.000 veces más brillante que el
Sol, y su distancia a la Tierra es de 1.300 años-luz.
El
cinturón de Orión está formado por tres estrellas que también conocemos como
las Tres Marías. De él cuelga su espada, en el medio se ve M42 “la nebulosa de
Orión”, que es una gran nube de materia formada sobre todo por hidrógeno, a
partir de la cual nacen estrellas. Esta cuna de estrellas alberga en su seno
“bebés estrella” de tan sólo entre 10 y 10.000 años. Se encuentra a 1.600
años-luz.
Fotografía de la Nebulosa de Orión tomada por el telescopio espacial Hubble.
Mapa celeste para el 14 de noviembre
Este mes tenemos la lluvia de estrellas Leónidas, aunque el
máximo se prevé para la noche del 17 al 18 de madrugada, con un poquito de
suerte podremos ver algunas el día 14.
Datos
obtenidos de AAM, Guía del Cielo de Enrique y Pedro Velasco, y Guía del Cielo
de Bernard Pellequer.
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